Ha escrito mas de treinta obras entre ensayos, libros, cursos y volúmenes que han iluminado áreas de la mejora personal, el coaching, la música y, esencialmente, las posibilidades de mejora del ser humano.
En estos multifacéticos y erráticos tiempos que nos tocan vivir es tan común y habitual escuchar hablar, en diversos medios y bajo las mas variadas situaciones, sobre los líderes y el liderazgo, que pareciera ser que este es el tema mas importante y relevante dentro de la compleja y entramada temática de la efectividad y perfecciones humanos. Pero esta variedad de manifestaciones acerca de estos temas incluye necesariamente también una gran variedad de concepciones equivocadas, perimidas o desactualizadas sobre lo que efectiva y verdaderamente significa ser un líder.
Pero el tema no culmina allí pues nuestra cultura nos ha hecho creer además que hoy todos son o deberían ser líderes: los políticos, los empresarios, los buenos profesores, los gerentes, los padres de familia, los vendedores, los deportistas, etc. Esta obligatoriedad cultural que nos empuja a ser líderes termina logrando la formación de una “cáscara” de liderazgo, dado que no todas las personas desean dedicar el tiempo de estudio y preparación que lleva a lograrlo. Queremos resultados rápidos y tomamos cursos de liderazgo que duran algunas horas; o bien leemos un libro que nos detalla las 10 técnicas que nos llevaran a conformarnos como líderes. Pero como la magia no existe y nadie puede transformarse en un autentico líder si no inicia un profundo camino de autoconcimiento y desarrollo personal en vías a la excelencia, las personas al menos se contentan con parecerlo. En el liderazgo también, entonces, se hace presente el gran drama de nuestros tiempos: no es “ser” lo que nos importa sino “parecer”. Si es muy arduo y tedioso transformarnos en verdaderos líderes al menos tratemos de parecer externamente líderes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario